Pues sí, ha sido una semana extraña, con muchas cosas por decir pero al mismo tiempo que prefiero callar. Definitivamente me encantan las sorpresas, por cosas como una llamada inesperada o un mensaje que solo yo entendería, es que me convenzo de que es tan bueno no estar esperando nada porque cuando recibes algo, por mínimo que sea, lo vas a valorar y disfrutar al máximo. Es increíble como a veces escuchar una voz, o una palabra, puede hacerte sentir una paz y una tranquilidad que extrañaba, en medio de todo este remolino de emociones.
Ni crean que no he maquinado en mi cabeza, mil y una tácticas y estrategias para poderme comunicar sin ponerlo y ponerme en evidencia, ni causar más problemas de los que ya tenemos. Es que lo pienso y me convenzo de que debo estar loca (nada nuevo), o soy demasiado creativa a veces (si algo realmente me interesa o implica un reto y peligro) jaja!
In other more joyful news:
Hoy me voy para Ibiza y Formentera, yupiiiii yeiiiii!!!
...ahhh, y se me olvidó echarme desodorante, jejeje!
1 comment:
Maravilloso cuando uno puede disfrutar de las pequeñas cosas de la vida: un viaje a Ibiza por ejemplo ;)
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